Quistes, lipomas, verrugas, lunares, lóbulos rasgados…
Cuando un cambio pequeño supone una mejoría importante
En la cirugía de la piel nos enfocamos en el tratamiento de afecciones de la piel que pueden ser molestas o tener un impacto negativo en la salud o la apariencia de una persona.
Algunos de los procedimientos que se realizan son: extirpación de lesiones cutáneas y corrección de lóbulos rasgados o dilatados.
Existen lesiones benignas, como los nevus (lunares),quistes sebáceos, lipomas, xantelasmas, papilomas, cicatrices ensanchadas, hipertróficas, queloideas y pequeñas anomalías congénitas como las que se presentan en orejas, párpados, mamas…
Y lesiones malignas, donde las que se intervienen con mayor frecuencia son: carcinomas basocelulares, carcinomas espinocelulares, melanomas, angiosarcomas, sarcomas….
Cirugía de la piel
Se trata de procedimientos seguros y efectivos que realizamos bajo anestesia local. En muchos casos los podemos realizar en la propia consulta o en un centro quirúrgico ambulatorio.
“Muchas personas creen que el cirujano plástico solamente aborda cirugías mayores. Pero los casos menores de cirugía de piel son una demanda cada vez más creciente en nuestros pacientes.
La ventaja de realizar este tipo de procedimientos con un equipo de cirugía plástica como el nuestro es que, además del tratamiento médico, velamos por la estética de los pacientes y por minimizar las cicatrices o que éstas no resulten perceptibles”.
— Dr. José Ramón Larrañaga I Dra. Carolina Díaz
Lóbulos rasgados y dilataciones
El lóbulo auricular y el uso de pendientes juegan un importante rol estético tanto para mujeres como para hombres.
Con el tiempo, el uso de pendientes pesados puede agrandar de manera gradual el agujero del lóbulo y éste aparece “estirado” , “alargado” .Esto provoca un efecto estético desagradable, de modo que no te ves bien con pendientes pero tampoco sin ellos!
Otra situación cada vez más frecuente entre la población joven es el uso de piercing para dilatar progresivamente el lóbulo auricular (Plugs o Tunnels). Estos dilatadores acaban distorsionando la anatomía normal y tras un periodo de uso, algunas personas desean volver a la situación original.
La buena noticia es que todas estas situaciones se pueden solucionar.
Con el tiempo, el uso de pendientes pesados puede agrandar de manera gradual el agujero del lóbulo y éste aparece “estirado” , “alargado” .Esto provoca un efecto estético desagradable, de modo que no te ves bien con pendientes pero tampoco sin ellos!
Otra situación cada vez más frecuente entre la población joven es el uso de piercing para dilatar progresivamente el lóbulo auricular (Plugs o Tunnels). Estos dilatadores acaban distorsionando la anatomía normal y tras un periodo de uso, algunas personas desean volver a la situación original.
La buena noticia es que todas estas situaciones se pueden solucionar.
Su corrección precisa de una pequeña intervención quirúrgica que no debe asustarnos ya que se trata de un procedimiento sencillo, que no requiere hospitalización y que se realiza bajo anestesia local con una duración de no más de 30 minutos. Lo que sí es necesario es una técnica precisa de Cirugía Plástica para alcanzar ese resultado, natural, duradero y con una cicatriz que pase desapercibida.
Extirpación de lesiones cutáneas
El procedimiento de cirugía de la piel varía según el tipo de afección cutánea que se va a tratar (verruga, lunar, quiste, lipoma, lóbulo rasgado de oreja…). En general, una cirugía de este tipo implica primero la administración de anestesia local, para evitar que el paciente sienta dolor durante el procedimiento.
Después, realizamos una incisión en la piel, el tamaño y la ubicación de esta incisión dependen de la afección a tratar.
En función de la sospecha diagnóstica, extirpamos la lesión con un mayor o menor margen de piel en los bordes.
En ciertos casos donde la piel no puede cerrar de forma directa, es posible que se precise realizar colgajos locales o injertos libres de piel.
Después, realizamos una incisión en la piel, el tamaño y la ubicación de esta incisión dependen de la afección a tratar.
En función de la sospecha diagnóstica, extirpamos la lesión con un mayor o menor margen de piel en los bordes.
En ciertos casos donde la piel no puede cerrar de forma directa, es posible que se precise realizar colgajos locales o injertos libres de piel.
Completada la operación, cerramos la incisión con puntos de sutura o adhesivos quirúrgicos.
Debe tener en cuenta que aunque no existe la posibilidad de quitar las lesiones sin ninguna cicatriz, una estudiada ubicación de las incisiones y una cuidada ejecución de la sutura implicarán un mejor resultado estético.
Se trata de un procedimiento seguro y efectivo que puede ayudar a tratar una amplia variedad de afecciones cutáneas.
Debe tener en cuenta que aunque no existe la posibilidad de quitar las lesiones sin ninguna cicatriz, una estudiada ubicación de las incisiones y una cuidada ejecución de la sutura implicarán un mejor resultado estético.
Se trata de un procedimiento seguro y efectivo que puede ayudar a tratar una amplia variedad de afecciones cutáneas.
Antes y Después
Siéntete a gusto con tu piel, estos pacientes ya lo han conseguido
El equipo médico de Larrañaga y Díaz cuida de forma personalizada cada uno de los detalles para que el resultado de cada paciente sea natural, proporcionado y bello. Te escuchamos para entender lo que quieres. Ofrecemos siempre información clara, honesta y personalizada.
Postoperatorio tras cirugía menor de la piel
El postoperatorio de una cirugía de la piel depende del tipo de procedimiento y la extensión del mismo.
En general, la sutura se retira tras 5-7 días.
Es importante siempre mantener la herida limpia y seguir las instrucciones de los doctores.
Solemos recomendar reposo y evitar actividades extenuantes que puedan afectar a su cura, así como la exposición solar directa en la zona hasta que la herida haya sanado completamente.
En el caso de los lóbulos, para poder volver a agujerear el lóbulo y usar pendientes es conveniente esperar 4-6 semanas tras la cirugía y siempre hacer el nuevo agujero unos milímetros separado de su localización anterior.
En general, la sutura se retira tras 5-7 días.
Es importante siempre mantener la herida limpia y seguir las instrucciones de los doctores.
Solemos recomendar reposo y evitar actividades extenuantes que puedan afectar a su cura, así como la exposición solar directa en la zona hasta que la herida haya sanado completamente.
En el caso de los lóbulos, para poder volver a agujerear el lóbulo y usar pendientes es conveniente esperar 4-6 semanas tras la cirugía y siempre hacer el nuevo agujero unos milímetros separado de su localización anterior.
El Dr. Larrañaga es cirujano plástico desde hace más de 20 años en Galicia y cuenta con un equipo multidisciplinar de medicina estética, cirugía y anestesia para asistir en sus procedimientos:
“La cirugía de la piel es efectiva para tratar afecciones cutáneas. Muchos pacientes experimentan una mejoría significativa después del procedimiento y se recuperan complemente.
Se trata de un procedimiento seguro, pero es importante hablar primero con el paciente sobre los beneficios y expectativas de cada caso individual”.
